jueves, 22 de noviembre de 2007

Un techo bien merecido

Te voy a construir un techo
quiero protegerte
un techo dos aguas
para ti que te llueve tanto

Un techo que me haga
por fin
notar la diferencia entre tú y el cielo
un techo nuevo
para inagurarlo con mis pisadas

Déjame
que no me cuesta nada
tengo un afán constructor
y la fuerza en las entrañas

Quiero hacértelo
te tomaré las medidas
para que te quede perfecto
y lo uses todos los días
siempre sobre tu cabeza

Tengo un afán destructor
y ganas de hacerte un techo
sin paredes ni columnas
sin sostén alguno

Un techo que te caiga encima
para que te mate
para yo matarte
quiero hacerte un techo

miércoles, 10 de octubre de 2007

Este mundo estaba en lo correcto

Era su día de matar arañas
y de plantar nuevas flores
hoy la vería
comprobaría que era real
siempre lo hacía
pero terminaba sin creerlo
ya le había dicho el mundo
que lo real no era perfecto
y ella lo contradecía

Era su día de limpiar esquinas
de hurgar en el basurero
de ocupaciones raras
y mente dispersa por conveniencia

Era día de achicar minutos
de entallar horas
para que le quedaran
de enterrar relojes
hoy la vería
sin importar las circunstancias
o consecuencias
hoy la vería
hoy era día de que pase lento el tiempo

Era su día de jalada de pelos
de pasear al perro
hoy perfumaría sus rincones
dudaría muchas veces de su atuendo
hoy le dolería más que nunca
no conocerse el cuento
hoy le diría ella que nunca más iba a verlo

Hoy la vería de blanco
decidiría jugar con la mente
invertir los papeles
y no matar el momento

Y es que su velo
volvía sus facciones de fantasía
su velo la diluía
y lo demás era incierto
la hacía un espejismo
y nadie dijo que estos
no pudieran ser perfectos...
es sólo que son espejismos.

lunes, 30 de julio de 2007

Se Busca Cómplice

Se sienta en la esquina
como esperando un cómplice
cruza las piernas
con ademán de maleante
y con el acto último
completa su pinta de matón:
prende un cigarro

Ha llegado la luna para acompañarle
los perros hambrientos le cantan su canción
ha empezado a sacudir los pies
como marcando el compás
no es el ritmo de su canción lo que sigue
es el blanco intenso de la luna
que le causa desesperación
los agita ahora con ímpetu mayor

Lo piensa y lo piensa
y de tanto pensarlo lo sueña
y de tanto soñarlo lo ansía
y el ansia mata

Mira el reloj
y se autodibuja la sonrisa de satifacción ficticia
como tratando de disculparlo
como si no importara la espera

Entonces vienen los buitres
a apresurar los fines últimos
y es eclipsada la luna
por un maligno designio
se han juntado las sombras todas
para asustarle
los perros empezaron a olerlo
sin cantarle

Se ha inclinado
para atarse los pasadores
y se ha dado cuenta
de que está descalzo

Se ha palpado todo el cuerpo
como buscando algo
luego ha abierto los ojos súbitamente
parece que lo ha encontrado...
falsa alarma
inexpresivo
se ha cruzado de brazos

Los buitres
los perros
el cielo sin luna
los sueños
la esquina
y el cómplice que no llega

¿Y si nunca llega?
...nunca llegó el maldito
¿alguien dijo que lo haría?

Si no existe el cómplice?
¡Oh!, es fulminante la incertidumbre...

Y Todo En Vano

Ella no tiene nombre
todo se le ha ido
hasta eso

Ya está lista ella también
para irse
para quedarse sola
sin todos
sin nadie
sin ella

Se le ha ido el alma entera
en la canción sin fin
su voz
de tanto arrullarle
su espíritu libre
en las palabras al vacío
y el eco de respuesta

Sus pies
sus huesos
su esqueleto
en la huída de él
de todo
de nadie
de ella

Su ilusión
de tanto golpe repentino
su razón
la que nunca tuvo
esa también se le ha ido
y sus ganas de todo
de nada
de él
no de ella

Sus manos
por mucho escarbar en la tierra
buscándolo
para no encontrar a nadie
no encontrarlo a él
ni encontrarse ella

Sus labios
de tanto besarlo equivocadamente
su amor
todito
se exprimió como un limón

Y así poquito a poco
se le fue yendo todo
en vano y sin darse cuenta
su pelo también se le ha ido
de tanto peinarse
para él
para todos
mas nunca para ella.

Rosados, felizmente

Rosado te veías
entre tanta nube borrosa
nada te opacaba
resaltaba tu color

Como por encima de todo
y de todos
llamándome con un "¡Hey, tú!"

Lo sé, lo sé
yo...
no me acerco porque me intimidas
ya estás casi fucsia
y más nubes se avecinan


las nubes
rosado
fucsia
la tormenta
con sus rayos y centellas

Tú y tu amigo Floyd
danzando entre tanta mierda sin colores
ambos rosados, felizmente.

Cuidadito Con Lo Que No Es Perpetuo

Dice que se va
que se va para siempre
que no volverá jamás
y por el tono de su voz
presiento que se lo cree

Que necesita un cielo
un lugar
en el que pueda ser realmente
un cielo quiere
pero no cuenta con alas
y los cielos terrenales son tan efímeros...
tanto que hieren

Es cierto
lo ha entendido
soñar su vida no sirve
si no la vive
es igual que nada
pero nada no es el final
y soñar lo distrae
entonces sigue soñando

Ahora se queja con tristeza
debió haber sido una vida plena para él
debió haber sido una vida hermosa
debió haber sido
nunca fue

Pero él seguirá soñando
y luego amenazará con su partida
que a nadie le asusta
culpará a la falta de cielo
de sus tragedias internas

Se quejará infinitamente
se lamentará sin medir las horas
por eso no tendrá tiempo
de tener su hermosa vida plena
por mucho añorar su cielo
y poco gozar su tierra.

domingo, 27 de mayo de 2007

De abismos, hamacas y sombras (o Pasteleada Romanticona)

Él escribió algo así: "Quiero alguien que tenga un abismo con hamacas, y que del fondo salga aire tibio de eucalipto. Arriba tiene que tener el cielo de otro mundo, un sol de reserva y algunos árboles en el precipicio que me inviten a tomarlos (Y mejor si son de frutas redondas de colores vivos, porque ésos sí que no puedo evitarlos), y algunos sonidos de fondo que no me dejen perderme.
Cuando caiga la noche y tenga ganas de esconderme, que me enseñe sobre las sombras, que en mi abismo son fuertes, y del precipicio a ellas uno debe entender mucho. Es demasiado fuerte...
Que me saque a pasear, robándome la atención, sin que me dé cuenta, y siempre hablándome... Muy suelta, sin nada más en su mente que lo que siente cuando su abismo y mi abismo se mezclan en su vientre.
Puede tener cara de vainilla y sabor a domingo; Puede tener piernas y brazos y ojos amarillos... Puede ser alguien muy simple, así de simple... Puede ser, no sé, en verdad... Puede ser cualquiera. Depende del día, depende de la era."

Yo respondí: "Yo tengo un abismo con hamacas, y aunque no despida un aire tibio de eucalipto, sí emana de él un olorcito único a caramelo recién hecho. Mi cielo es de este mundo, pero es bastante bonito... tanto que parece de otro mundo. Tampoco mi sol es de reserva, pero sí SE reserva muchas veces con el paso de las nubes (Es cierto que es bastante caballeroso, y a veces las deja pasar concientemente por simple cortesía), pero otras veces las desdeña.
Mis árboles son crecientes, y sus frutas, amorfos y diminutos entes nacientes... SIN AYUDA DE NADIE. Los sonidos que emite mi abismo son notas del solo de "Aeroplane" algunas veces, para animarte a tocar algún nuevo-viejo instrumento; Otras veces, simples voces de los 60's y 70's; Y algunas otras, tímidos soniditos de ignorancia y temor. No sé si con ellos llegues a pederte, porque quizá más bien me pierda yo... ¡Mas sería genial!
Y cuando caiga la noche podemos escondernos juntos porque le temo a la oscuridad. Y aunque no sé mucho de sombras, a veces puedo parecerme a una.(Pero como en aquel cuadro de la exposición de arte, puedo ser oscura y salvarte de la luz... O a lo mejor tú puedes salvarme a mí de ella).
Te enseñaré las sombras de mi abismo para que no temas más de las que habitan en el tuyo; Quizás hasta podamos hacer amistad con ellas y bailar. Puedo sacarte con gusto a pasear, y "robarte" la atencion, pero 'pidiéndote permiso' antes, ¿Por qué no?. ¡Es más!, podemos hacer un trueque: Intercambiarnos atenciones por tiempo indefinido.
Lo que está en mi mente es lo que siento. La de arriba, tan dócil, se deja dominar por el que late (Como ahora, ejemplo perfecto)... Y es que ¡así somos los seres pasionales!, en principio. Podemos mezclar nuestros abismos en mi vientre... Y también en el tuyo. Podemos vivir en nuestros abismos siempre... O PODEMOS VIVIR EN MI VIENTRE Y EN EL TUYO. Y así puedes tener tu cara de caramelo recién hecho, ¡del caramelo de mi abismo! Y yo el rostro de vainilla y el sabor de todos los días (con la tranquilidad que se le atribuye a los domingos).
Tengo piernas y brazos, además ojos que, a pesar de no ser amarillos, son marrones y sencillos. Puedo ser así de simple... Sí, soy 'así' de simple; Tan simple como todo lo que acabo de escribir. No lo sé. Tan simple si así quieres verme, tan compleja si así lo prefieres... Depende de tu animo, tus gustos, tu percepción y tus ganas."

Esquizofrenia

"El hombre consta de una multitud de almas, de muchísimos 'yos'. Descomponer la aparente unicidad de la persona se tiene por locura, la ciencia ha inventado para ello el nombre de ESQUIZOFRENIA. (...) Pasan muchos hombres por 'normales', que están irremisiblemente locos, y a la inversa, tienen a muchos por locos, que son genios." -Fragmento de 'El Lobo Estepario'.

Esquizofrenia

Mi compañerito de noches vagabundas se ha ido
mi colega de los pies descalzos y el tiempo sin horas
el de las charlas eternas colmadas de silencios
(de los cómplices, no de los incómodos)

Se ha ido mi trotamundo
el caminante de mi acera
(de mis caminos abruptos y senderos sin asfalto)
mi piedrita reconfortante en el zapato
mi otro par

Y con las manos inmovilizadas
amordazada toda
no distingo si mi pequeño amigo vino a verme
veo entre rejas sombras extrañas
mas estoy impotente

Ven por mí, querido idiota
ven,
antes de que te pierdas en mi disfuncional cerebro
ven,
antes de que deje de inventarte día a día...
(Ésto no acaba así; Debo inventarle un mejor final)

¿Por qué "El otro cielo"?

Otro Cielo

No existe esponja para lavar el cielo
pero aunque pudieras enjabonarlo
y luego echarle baldes y baldes de mar
y colgarlo al sol para que se seque
siempre te faltaría un pájaro en silencio

No existen métodos para tocar el cielo
pero aunque te estiraras como una palma
y lograras rozarlo en tus delirios
y supieras por fin cómo es al tacto
siempre te faltaría la nube de algodón

No existe un puente para cruzar el cielo
pero aunque consiguieras llegar a la otra orilla
a fuerza de memoria y de pronósticos
y comprobaras que no es tan difícil
siempre te faltaría el pino del crepúsculo

Eso porque se trata de un cielo que no es tuyo
aunque sea impetuoso y desgarrado
en cambio cuando llegues al que te pertenece
no lo querrás lavar ni tocar ni cruzar
pero estarán el pájaro y la nube y el pino.

Mario Benedetti

Romita (Estrella)

Te miraba, autista
Y parecías sólo una cáscara
Tu contenido se ha ido o está perdido
Eso incluso tú lo desconoces, querida

Tu bondad está siempre latente
En tus ojos vacíos que no expresan nada
Y vamos contigo
Por amor y también por pena
Vamos todos a verte
Aunque estés muerta en vida

Con momentarios lapsos de lucidez
y desatinos ingenuos apareces
A traernos la ilusión
Y te seguimos la cuerda
Volviéndonos niños
Creyéndonos ingenuos
Sólo por ti

¿Quién te esperará en el vacío?
¿Quién lo hará?
Cuando des ese paso definitivo
Cuando salgas del limbo
Cuando trasciendas, por siempre
Más allá de los límites humanos...

Estaremos pensando en ti, entonces
Y no sentiremos más pena
Pues serás estrella.

Ascensor

¿Cuántos pisos visitaste mientras, atrapada en las paredes de aquel virtual sube y baja, soñabas entusiasmada con entregarte?
El calor corporal fue más intenso que el frío metal, y en un acto sexual, casi sobrenatural, intercambiaron caricias, fluidos y algo más.
Entre voces forasteras, el peligro inminente no te altera. Su impetuoso susurro y esas gotas de sudor siembran en ti la extraña sensación de querer ser sorprendida por algún fortuito espectador.
La temperatura incrementa, tus poros se dilatan; tu reflejo en el espejo se funde misteriosamente con aquella manifestación de tu tórrida y acelerada respiración.
La excitación plena de tus sentidos arrebata la escasa noción de raciocinio que te restaba; la lujuria te nubla la mirada; y en un intento frustrado de tus miedos internos por ser liberados, tus uñas clavas en su espalda sudorosa, sólo para confirmar que el deleite extremo no es delirio ni otra cosa.
Desesperada maniobras la máquina, sin precisión; desprecias su principal función. Has convertido a un cubículo de metal en un cuarto de hostal. No importa si hacia el cielo o al infierno va, suba o baje, tu demencia ha de aumentar.
Y en el descubrimiento y encuentro de lo ignoto e inexplorado se contorsionan tus extremidades, realizando ademanes nunca antes imaginados. Tu cabeza se desliga totalmente de tu cuerpo; te has entregado, sin advertirlo, al placer etéreo del fugaz momento.
Y ya es tiempo, el instante ansiado ha llegado. La manifestación infinita del gozo ilimitado en tu boca ha asomado, y a tus labios ha invitado a emanar los más agudos aullidos, gemidos acelerados, producto de un indescriptible frenesí descargado.
Te abotonas la blusa, te acomodas el sastre. La travesía ha culminado. Después de esto no hay más nada. El caminante errante encuentra el sendero indicado, tus neuronas vuelven a encajar en tu cerebro, tu capacidad gimnasta se atenúa, la flexibilidad se esfuma... Tu descaro se retrajo y avisó a tu timidez, a tu vergüenza y tu ternura.
Sales al mundo real donde las pasiones se reprimen, te camuflas entre la muchedumbre. Finges el resto del día; caminas en tacones altos, disfrazada de oficinista; otorgas un par de hipócritas sonrisas y así aparentas para el deleite social.
Tu mente está harta de alucinar; tu cuerpo, ávido por realizar; pero tus prejuicios han de impedir la revelación que tu voraz apetito interno quiere hacer estallar; aun sabiendo que, para la eternidad, breves instantes de real fantasía valgan más que una vida entera de emociones contenidas.

On the run

¿Pero cuándo acabaré de correr?
El camino se hace largo
Tengo ganas de beber
De parar y dejarme caer

Esos ruidos extraños me confunden
Me siento acechado
Me persiguen las sombras
Y no me dejan ser
Cómo quisiera volar…

¿Y los helicópteros?
¿Cuándo van a aterrizar?
Mis pies están cansados
Necesito reposar
No me empujen
Porque no puedo más

Mis rodillas
Mis tobillos
Desfallezco
Es todo mejor así
Es mejor estar echado
Disfruto mirar hacia arriba
La pose horizontal siempre me ha gustado

No me importa
Así estoy bien
Devórenme ya,
Malditos gusanos

Esperen
¿Dónde quedó mi mundo rosado?

Escena de rutina

Y te miré con ojos de lluvia
Pero abrazando el sentimiento caprichoso
que se escapa en la mirada
Apretando con mis dientes el grito que se escupe
Amarrando a mi niña que quería irse contigo

Y luego me di media vuelta
Entre piedras, tierra y muerte
Y me he sentado en la calle para pensarte
Y han llovido mis agitados ojos preñados

He echado gritos internos
Ahogados y prolongados
Quiero sacarlos, quiero botarlos

Han secado mis manos pobres
Mis húmedas mejillas rosadas
Se han abierto mis dos soles por completo
Y han seguido mis pies tus huellas

Voy ya por el camino de todos los días
Por el sendero acostumbrado
Y a la hora implícitamente pactada
Ya llego más tranquila a tocarte la puerta

Any colour you like

Cualquier color que quieras
Verde, azul o morado
En serio ¡El que quieras!
Negro, blanco o rosado
Y el mejor pastel de cumpleaños.

El color que prefieras
Quizás amarillo pato
Dos libros nuevos y un disco ya usado
Y la mejor de las sorpresas.

Elige tú un color
Celeste oscuro o el más claro
Escoge un corazón de entre todos y agárralo
Hoy es todo tuyo
Y el más rico helado.

El color que más te haya gustado
El rojo
Así como tus labios encantados
El color rojo te ha gustado
Todos los corazones son tuyos
Y el mejor de los regalos.

Para que no digas nada

Fruto del insomnio autoprovocado
De cafeína en exceso y problemas atragantados
He decidido entregarme
Para que no digas nada
Voy en camino
Me he rendido
Aún quiero estar contigo.

Para que no digas nada
Me lo aguanto
Junto mis labios suavemente
Ya no hay llanto
Y he tomado otro café
Y he fumado otro cigarro
Para que no digas nada.

Sólo duermo, ya no espanto
Duermo o juego a estar dormida
No me quejo, ya no opino
Para que no digas nada.

Me he parado en el umbral mediocre
Para no estar dentro
Para no estar fuera
Y me he conformado
Sólo espero silenciosa
He bajado los brazos
Para que no digas nada.

He tragado el vómito y me he volteado
Te he mirado a los ojos con un pedacito de alma
Y me he aguantado el “Te amo”
Para que no digas nada.

He dormido hoy contigo
Sin tocarte las pestañas
No he velado tu sueño
No me senté al pie de tu cama
No he bebido de tu vaso
Para que no digas nada.

Fríos, helados

Con voz baja y susurrando
Como jugando ajedrez
Como cantando
Has hablado
No sé qué has dicho
Pero has hablado.

En un campo solitario
Y con la luna como cuadro
Frente a ese río oscuro
Entre maleza y pasto
Has callado
No sé qué ocultaste
Pero has callado.

Y de pronto
En la noche que cae despacio
Entre la multitud y a solas también
Me has mirado.

Con miedo
Casi temblando
En la paz de la nada
Y lo infinito de tu incertidumbre
Y de la mia
Has caído
Inconsciente
Has cerrado tus ojos
Te has cansado
No sé cuándo despertarás
Pero tus pupilas me has negado.

Quizá nunca te levantes…
Este mundo de locos me obliga a recostarme a tu lado
Para enfriar también mis manos
Para dejar de sentir pena
Para dejar de sangrar llanto.

Y no sé por qué
Ni cuándo
Pero he llorado.

Te acompaño infinitamente
Hasta el otro lado
Hemos dormido los ojos
Escapamos
Fríos estamos
Helados.

Cuidado, traiciones

Advierte que el gran sol que te alumbraba
Es ahora la sombra que te nubla la mirada.

Pisa firme
Que tus hermanos y colegas se han hundido
En sus propias arenas movedizas.

Respira hondo antes de exhalar
Desata tus manos con cautela
Y amarra con recelo tus sabias palabras.

Has de saber, compañero
Que la mano que hoy te toca
Está fría porque ha muerto
Porque la han matado
Porque tú la has matado.

Reincidente

Ya me derrumbé
Mis rodillas a prueba de balas
Mi tonto enamoramiento
Mis razones que nadie entiende
Mis ideas sin fundamento
¿Las comprendes tú?

Mis lagrimitas cansadas y abundantes
Mis inmóviles brazos
Y mis caderas rotas
Mis uñas pintadas
Mis sueños quebrados
Mi raciocinio en tus manos
Tu inconsciencia…
Me perturbas.

Mi cielo caído
Atrapado en tu cuarto
Un tercio de mis frases medio poéticas
Y tú, el artífice de todas ellas.

Mi ímpetu desesperado
Mi necesidad
Una sola, reiterada y maldita obsesión
Nuevamente, el creador
Nuevamente, tú
Reincidente, yo.

Porcelana

¿Estás triste, Porcelana?
¿Sientes pena?
¿No te quieres más?
Dime, cuéntamelo a mí
Que sellados tengo los labios

¿Quién te tiene de manos atada?
¿Quién ignora tu clamor?
Sé tú, Porcelana
Tumba muros de nubes
Habla el silencio
No al temor

Ya no llores, Porcelana
Ya no sientas más dolor
No hay remedio, Porcelana
Si el destino designó

Las balas perdidas
Los argumentos inservibles
No tengo una máquina de tiempo
Perdón
Y la impotencia, Porcelana
Guárdala para después
Arrójala al rincón

¿Te has rendido, Porcelana?
Eres frágil, eres tierna
Es mejor
Te has rendido, Porcelana
Yaces ecuánime, inerte, sin sol

No sonríes, Porcelana
Mas no importa
Ya no tienes la carita triste

Siento pena, Porcelana
Ya no me quiero más
Me tienen de manos atada
Ignoran mi clamor

Ya no lloro, Porcelana
Ya no siento más dolor
La impotencia en el rincón

Lo he aceptado, Porcelana
Me ha costado
Estoy conforme; mejor dicho, resignada…
Ay, ¡Tan inconforme!
Pero tan sin fuerza, Porcelana
Pero tan sin ganas…

Me he rendido, Porcelana
Pero no hay más cara triste.